Soy la menor de una familia numerosa, así que desde muy pequeña tuve cuñados. Algunos siguen en mi vida, otros ya no. Así que además de psicóloga, tengo experiencia demostrable en ser cuñada, años de observación a una experta, consagrada y entregada suegra (mi santa madre), y por ende, legitimación suficiente para aconsejaros todo lo que viene a continuación.
- Tu familia política no tiene por qué caerte estupendamente. Sé realista: ¿acaso te caen súper bien todos y cada uno de los miembros de tu propia familia?
- No tienes por qué ser su amiga. Vais a ser familia. No confundas términos.
- Trata con respeto y cariño a las personas mayores y a los críos.
- No finjas ser alguien que no eres por agradar, porque tarde o temprano, la impostura explotará en tu linda carita.
- Tus suegros no son el enemigo. Quieren a tu pareja tanto o más que tú, y se conocen desde hace muchos más años. Pueden ayudarte a tener un matrimonio feliz y bien avenido.
- Jamás critiques a tu familia política delante de tu pareja, a no ser que haya pasado algo muy serio. Aun así, ten consideración y no hagas leña del árbol caído.
- Si tu pareja tiene problemas con alguien de su familia, no aproveches para despotricar. Calla, escucha, consuela, apoya, aconseja e intenta buscar soluciones.
- No siembres cizaña.
- No crees bandos, y si los hay, intenta mantenerte al margen porque lo más probable es que no conozcas toda la historia.
- No cuestiones jamás cómo han educado tus suegros a sus hijos (incluyendo a tu futuro, claro). No existen los padres perfectos. Así que antes de abrir la boca, piensa que gracias a ellos has encontrado a la persona con la que compartir tu vida… mirándolo así: no lo han hecho tan mal, ¿verdad?
- No juzgues con tus parámetros el funcionamiento de tu familia política, porque desconoces la mayor parte de su historia. No tienes criterio para saber qué hay detrás de cada comportamiento.
- El amor de los padres y hermanos es distinto que el amor que hay en una pareja. ¡No es un concurso!
- Déjales su espacio, pero acude rauda y veloz cuando hagas falta.
En resumen, compórtate con tu familia política como te gustaría que tu futuro marido se comportara con la tuya. Te ahorrarás conflictos, y tendrás un matrimonio más feliz.
María Súnico
Psicóloga Col. Nº AN06945
Paso consulta en la Clínica San Rafael de Cádiz (cita en el 956 017 270 o el 657 250 147), además de hacer mis pinitos en prensa escrita, radio y televisión.
http://tambientenemospiernas.wordpress.com
Twitter e Instagram: @maria_sunico
Facebook: Las psicólogas también tenemos piernas.